Desde hace un tiempo siento mucha indignación... las tasas de cesáreas en muchos hospitales de este país son elevadísimas.
Muchos bebés son obligados a nacer, no son ellos los que poco a poco van abriéndose camino, beneficiándose del coctel hormonal que invade a su madre en esos momentos, ni sus pulmones son preparados para desplegarse una vez han nacido, ni sus neuronas son puestas a punto en esos últimos momentos antes de salir al mundo exterior gracias al proceso de parto en el que está su madre...
Y a muchas mamás se les arrebata ese momento, esa experiencia transformadora, esa experiencia emocional y física. De ella puede salir fuerte, con una personalidad reforzada, capaz de comerse el mundo, pero además estará preparada para recibir en su pecho a su hijo, para crear el vínculo fuerte con él que le guiará en sus pasos acompañándolo en su vida, le ayudará a poder darle de mamar ya que preparará su cuerpo para ello, además de que al no sentirse ortopédica todo resultará más fácil, y su útero dejará de sangrar antes, tendrá menos anemia...
Innumerables son los beneficios del parto fisiológico frente a la cesárea. Ahora llega mi duda... a toda costa???
Ahora los hospitales tratan de reducir al máximo el número de cesáreas que se realizan, cosa que está fenomenal, pero reducir forzando al máximo las dilataciones y los expulsivos de los bebés... tiene sentido?
Tiene sentido hacer que el nacimiento de ese bebé sea así de duro? Sacarlos con forceps, con unos monitores de rctg horribles, con aguas meconiales bastantes espesas...
Para reducir el número de cesáreas no sería mejor trabajar con el ambiente, mejorarlo para que los partos fluyeran más, trabajar en la preparación maternal, para que las mujeres estuvieran más conectadas con sus cuerpos, para evitar la intervención al mínimo desde el principio para evitar los riesgos al máximo??? y para que el cuerpo fluyera por si solo sin terminar necesitando esas intervenciones???
No puedo evitar sentir que se está comenzando la casa por la ventana, que trabajar desde la base sería quizá más sencillo, para eso habría que modificar la manera de comprender la maternidad, los partos, los nacimientos, el postparto... pero si se sigue entendiendo el parto como hasta ahora... pues no sé si realmente es el camino...
Sin cesáreas pero con nacimientos dignos